Repensar San Cristóbal y hacer un plan de trabajo con miras al 2030

San Cristóbal. – Luego de más de dos años de gobierno del PRM, en la provincia de San Cristóbal se sigue esperando la llegada del tan anunciado “CAMBIO”, esta provincia que es la cuarta en aportes al PBI no recibe  del estado lo que sus habitantes esperan y han esperado desde hace más de seis décadas.

Este abandono gubernamental sin dudas crea una brecha que separa nuestra provincia de aquellas que no han corrido con igual desdicha, enumerar las obras construidas entre 1960 y el 2020 se limita a unas zonas industriales, tres mercados, asfaltado de caminos vecinales y carreteras, cuatro hospitales de atención de tercer nivel y algunos centros de primer nivel, una extensión universitaria y varios centros escolares.

Estas construcciones sin dudas eran y son imprescindibles, sin embargo, viendo quienes éramos en el 1960 una aldea rural con apenas algunas facilidades y dado el cambio que ha experimentado el mundo en los últimos 40 años seguimos viviendo en espacios desiguales tanto en cantidad como en calidad, con edificaciones y facilidades que son excluyentes casi en su totalidad.

En nuestra provincia menos de un 5% de las construcciones tienen acceso para personas con movilidad reducida, para personas ancianas, para ciegos, para niños en sus coches, en fin, lo poco que se ha construido no se corresponde con las demandas diarias de la población.

En el caso de los gobiernos del PLD especialmente los dirigidos por el Doctor Leonel Fernández son quienes tienen la mayor carga de responsabilidad por el momento histórico en el que le tocó dirigir la nación, el gobierno que dirigió Hipólito Mejía se centró sobre todo en el tema de los caminos vecinales y las carreteras en los campos, sin pensar en otras inversiones que impactaran nuestra provincia.

El gobierno de Danilo Medina solo aporto algunas construcciones de escuelas incluyendo algunas en lugares donde el crecimiento poblacional no las necesitaba, obras llamadas espejos pues estaban frente a otras edificaciones escolares y no servían más que para reflejar el otro edificio pues no había estudiantes ni profesores para ocuparlos, “negocio para los compañeritos.”

Volviendo al día de hoy, nuestra provincia necesita con urgencia repensarse, es necesario que nuestras autoridades piensen en el San Cristóbal 2030 y junto con los grupos empresariales desarrollen una estrategia que permita alcanzar un modelo de desarrollo acorde con nuestros tiempos, (muchos pensaran en que excluyo la sociedad civil y los grupos comunitarios y no es el caso) es que un plan para que pueda ser realizable necesita primero ser diseñado por pocos y luego discutido por todos.