Las evaluaciones que se utilizan para medir las habilidades y capacidades de los docentes suelen traer traumas, protestas, inconformidades y hasta burlas en una sociedad que no acaba de entender que las mediciones internacionales sobre el nivel de conocimiento de nuestros estudiantes es un reflejo directo de la preparación de nuestros y nuestras docentes.
El sistema educativo de la República
Dominicana tiene que ser refundado si se pretende obtener resultados positivos
de cara a futuro, tenemos que aunar esfuerzos a favor de la preparación de los y
las docentes, tenemos que tener como país un plan de reforzamiento continuo de
las habilidades tanto pedagógicas como técnicas de nuestros y nuestras
docentes.
No podemos seguir pasando la
pagina y cerrando los ojos para no ver el gran problema que tenemos a nivel de
nuestros profesores, personas que por vocación quieren ayudar, pero por
preparación no pueden, profesionales de la educación que no pueden manejar
adecuadamente una computadora ya sea de escritorio o portátil, graduados que no
pueden realizar una presentación utilizando herramientas informáticas.
Tenemos que enfrentar como
nación esa brecha digital que afecta también a los docentes, hay que crear
programas de lectura y escritura donde participen todos y todas los que
pretenden o ya están ejerciendo como docentes y esos programas tienen que tener
un riguroso seguimiento, estos llamados concursos de oposición desnudan una
realidad que no hemos podido superar.
Ahora se hace imprescindible
hacer un alto en el camino y refundar nuestro sistema educativo de forma tal
que aseguremos que quienes se han dedicar al sagrado oficio de enseñar tenga
los conocimientos, competencias y fortalezas que necesita un sano sistema educativo,
dejemos de alimentar el monstruo y empecemos a fortalecer nuestro sistema
educativo.
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