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Rhina P Espaillat exquisita Dominicana



Rhina P. Espaillat (1932- )

La vida te brinda muchas alegrías y satisfacciones,  una de ellas es el haber conocido a  Rhina P. Espaillat a través de la tertulia cultural Miercoletras;   no me fue posible asistir a alguna charla o conferencia que ella ofreciera en sus visitas a su madre patria,  sin embargo, este encuentro semanal propiciado por ella y un grupo de amigos poetas, es todo un lujo compartir con una persona tan virtuosa que irradie sentimientos de amistad,  amor, paz, bondad, magnanimidad,  sus amigos más cercanos le llaman Rhinamai, al considerarla una madre, una consejera.

Poeta, narradora, ensayista y traductora dominico-americana. Nació en Santo Domingo, República Dominicana y vive en Estados Unidos desde el 1939; es educadora retirada, luego de enseñar artes del lenguaje y literatura por décadas en las escuelas públicas de la ciudad de Nueva York. Rhina ha obtenido numerosos premios literarios como poeta y traductora, entre ellos: T. S. Eliot Prize in Poetry (1998); Howard Nemerov Sonnet Award, en1998 y en  2003; además, el Richard Wilbur Award (2001); el Oberon Poetry Prize: en 2002 y 2003; el

Robert Frost Foundation Tree at My Window Prize for Translation: 2004; igualmente ha sido premiada varias veces por New England Poetry Club y Poetry Society of America. Sus trabajos literarios han sido publicados en cientos de revistas literarias y en varias decenas de antologías. Es miembro fundador de varios talleres literarios y mantiene constante actividad literaria en diferentes medios, incluyendo la Tertulia Miercoletras.

El padre de Rhina Espaillat, Don Homero Espaillat Brache le exigía hablar español correctamente en el apartamento y el inglés quedaba para la escuela y fuera, o sea, él estaba interesado en que ella conservara la identidad del país. Además, tenía estrictamente prohibido mezclar ambos idiomas. Consideraba que los idiomas deben cuidarse, respetarse, nada de spanglish. Cuando era niña no comprendía esas rigideces, a veces terminaba llorando, hoy en día le agradece por hacerla bilingüe.

Con el poema BILINGUAL ofrece el testimonio:

Bilingual/Bilingüe

My father liked them separate, one there,

one here (allá y aquí), as if aware

that words might cut in two his daughter’s heart

(el corazón) and lock the alien part

to what he was—his memory, his name

(su nombre)—with a key he could not claim.

“English outside this door, Spanish inside,”

he said, “y basta.” But who can divide

the world, the word (mundo y palabra) from

any child? I knew how to be dumb

and stubborn (testaruda); late, in bed,

I hoarded secret syllables I read

until my tongue (mi lengua) learned to run

where his stumbled. And still the heart was one.

I like to think he knew that, even when,

proud (orgulloso) of his daughter’s pen,

he stood outside mis versos, half in fear

of words he loved but wanted not to hear.

Asidua lectora, en horas de almuerzo cruzaba a la biblioteca, allí se encontró con una antología que le marcaria su vocación: “A Treasury of Great Poems English and American”, compilación de Louis Untermeyer del canon literario de la poesía en idioma inglés desde la invasión anglosajona de Gran Bretaña hasta el período de entreguerras del siglo XX.

Su padre siempre atento y comprometido con la educación de su hija ante la imposibilidad de comprarle esta antología le   solicitó ayuda a su padrino: Don Rafael Brache, quien se la obsequió en la Navidad de 1943, este libro le marcó la señal, sumamente apreciado, a pesar del paso de los años lo conserva  "vendado con cinta, pero milagrosamente todavía en una sola pieza y todavía en el trabajo, como un valiente veterano"

Espaillat dice que este regalo del libro de Untermeyer constituye "otro punto de inflexión en mi vida". Ella agrega: "¡Me lo comí! Es un libro maravilloso y se convirtió en mi Biblia poética".

Lo que más me gusta de Rhina P. Espaillat es su apuesta por la educación pública gratuita de calidad, ella que fue educada en estas instituciones de las cuales se siente orgullosa, clama porque en la República Dominicana,  las escuelas públicas ocupen un sitial de preponderancia, en lugar de los colegios privados, que la gente se sienta orgullosa de que sus hijos y nietos asistan a escuelas públicas porque ellas garantizan la cultura de un país, el desarrollo social y cultural.

A pesar de que comenzó a componer poesía en inglés cuando sólo tenía 8 años, el primer poema de Espaillat que se conserva en inglés, 'First Snowfall', fue escrito a los 12 años.  Se refiere a la primera nevada que vivió en New York, es bastante triste, porque a pesar de la belleza de la nieve, le hacía falta su pueblo y su calor eterno.                             

The First Snowfall

Fell on the first snowfall

Flowers from the skies,

Burying under heaps of snow

The place where summer lies.

And in that same tomb lies my heart,

Dead with summer’s gladness,

Harried by the autumn winds,

Prey to winter’s sadness.

Rhina P. Espaillat, 1942

El primer poema que escuché de Rhina Espaillat se llama Coplas donde muestra el orgullo de ser dominicana.

COPLAS

NACI EN LA CIUDAD PRIMADA

Nací en la Ciudad Primada

donde nació el Continente

de todos los ríos del mundo

fluye el agua de mi fuente.

Crecí en Quisqueya la suave,

en el valle del Cibao

en la sombra del caimito,

la lechosa y el cacao.

En el patio de mi casa

en el amor de mis viejos

aprendí canto y costumbres

cuentos y cultos añejos,

La marchanta y su batea,

el dulcero y su pregón,

el cafecito en la tarde,

La virgen y la oración.

En mi sangre corre España,

la costa de Oro y Haití.

Taino, negro y negrero

los tres se juntan en mi,

Con el mas recién llegado,

árabe, chino, judío,

porque el que pisa mi tierra

se vuelve un hermano mío.

Aprendí luego el exilio

que impone la tiranía;

por eso vivo tan lejos

de la tierra que fue mía.

Sé lo que dictan los años,

lo que enseñan las distancias;

no deja de ser humano

quien cambia de circunstancia.

y aunque lo niegue quien quiera

somos hermanos de cuna

nos parió la misma tierra

y toda la tierra es una.

Rhina Espaillat dedica un poema a su tataranieto, quien todavia no existe. El   poema se dice asi, y se titula Para mi tataranieto, el astropionero:

 "Tú, fulanito, que por los caminos de mi sangre

te lanzas al futuro, dime si te llevas

los mil sabores del viento, la voz del rio,

las lenguas de musgo y helecho que cantan la tierra.

Y dónde dejaste la lluvia? que no se te pierda,

ni el gemir de la gaviota en su desierto azul,

ni esas estrellas tibias como caricias

que no encontrarás en tus noches de acero.

Fíjate que no te falten mariposas;

aprendete el color de las horas;

y toma, que en esta cajita de huesos

te dejo el perfume de los mares."

Este soneto lo escuche del poeta y arquitecto José Enrique Delmonte Soñe recientemente, y dice así:

NO LE ENTRISTECE AL RUISEÑOR SU SUERTE, de Rhina Espaillat

No le entristece al ruiseñor su suerte

De brindar música al hosco caminante;

Ni al agua del arroyo refrescante

Que el viajero, sediento hasta la muerte,

Se mire en sus cristales sano y fuerte

y sin mirarle más, siga adelante;

ni a ti, libro sencillo y elegante,

que no te de las gracias al leerte.

“Cuándo ha sabido,” dile así a tu autor--

“el hombre, afanoso e impaciente,

detenerse a aplaudir al ruiseñor,

o al agua pura? Poeta, es evidente

que al ingrato que deleita de cantor

lo habrás de perdonar como la fuente.”

Rhina Espaillat, además es ensayista, nos leyó su presentación para  un Programa del Día Internacional de la Mujer titulado: “Observaciones sobre la voz de la mujer.”

“He descubierto como traductora, que entre las obras más antiguas de la literatura en español, se encuentran unos breves poemas llamados jarchas.

*(Las jarchas son breves composiciones líricas escritas normalmente por poetas andalusíes o judíos durante el período del Al-Andalus. Normalmente, las jarchas cierran las moaxajas, otra clase de poemas cultos más extensos, todos anónimos, escritos con frecuencia en árabe o en ladino, el idioma de los judíos españoles y traducidos al castellano, comenzando en el siglo XI, gracias a las estrechas relaciones entre los tres grupos religiosos, que convivían en esa época en España.)

Los contenidos de esos poemas fueron, con gran frecuencia, escritos por mujeres, nos llegan todavía llenos de la vida de la mujer; tienen la frescura de flores recién cortadas, son textos olorosos a la vida diaria y efímera, a los amores y a las penas, y los placeres y esas esperanzas de esas mujeres sin nombres, a veces contienen cierto misterio, pero también una sencillez y una vulnerabilidad, que los convierten en textos íntimos y a la vez universales.

Permítanme leer primero una canción de cuna en la voz de una madre judía del siglo XV.

Durme Durme Mi Andjeliko- canción sefardí antigua en Ladino:

Durme durme mi andjeliko

Durme durme mi andjeliko

Ijiko chico de tu nasion

Kriatura de Tsion

No konoses la dolor

Por ke nombre me demandas

Porke no kanto yo

Ah, kortaron las mis alas

I mi boz enmudesio

Ah, el mundo de dolor

Durme, durme mi andjeliko

Ijiko chiko de tu nasion

Kriatura de Tsion

No konoses la dolor

Porke mi nombre me demandas

Porke no kanto yo

Ah, kortaron las mis alas

I mi boz amudesio

Ah, el mundo de dolor

Durme, durme...

Traducción al español

Duerme duerme mi angelito

Duerme, duerme mi angelito

Hijito chico de tu nación

Criatura de Sion

No conoces el dolor.

¿Por qué preguntas por mi nombre?

¿Por qué no canto yo?

Ah, cortaron mis alas,

Y mi voz apagaron

Ah, el mundo de dolor.

Duerme, duerme mi angelito

Hijito chico de tu nación

Criatura de Sion,

No conoces el dolor.

¿Por qué preguntas por mi nombre?

¿Por qué no canto yo?

Ah, cortaron mis alas,

Y mi voz apagaron

Ah, el mundo de dolor.

Duerme, duerme...

Y ahora una queja de amor, una muchacha árabe, que echa de menos, a su “Habibi,” su compañero o novio, que esta “arrayana,” como diría el español, está en la puerta, o sea despidiéndose, (a Rhina le encanta esta época de la historia de España porque vivieron en paz durante 600 años, produjo lo más rico en España, en la arquitectura, en la música, en la poesía, en la ciencia, en todo) …ella le confía a su madre que le falta la “chumela chacrela”…la melena rubia del novio, su cuello y sobretodo su boquita coloradita.

Jarcha:

¿Qué faré, mamma?

Meu al-habib est ad yana.

“¿Qué haré, Madre?

Mi amigo está a la puerta.”

Ke Bareyo o ke serad de mibi (¿Qué haré o qué será de mí?)

Habibi (¡Amigo mío,)

nom te tolgas de mibi! (¡no te apartes de mí!)

¡Qué interesante es esa tendencia que tiene la mujer, de comprender el mundo, la realidad dentro del marco de lo humano, y sobre todo de lo físico, es como pensar no solamente con el intelecto sino con el cuerpo entero, imagínense que diferente seria el sabor, el peso de varios textos importantes si se hubieran escrito en la voz de la mujer.

Por ej. Veamos la plegaria más famosa del mundo “El Padre Nuestro”, pero con un comienzo distinto:

“Madre nuestra que estás en el conuco,” o quizás “Madre Nuestra que estás en la cocina”, como seguiría ese texto después de tal comienzo, ¿y qué haría la voz de la mujer con esa frase? Nada normal cuando se vuelve…” hágase señora tu voluntad,” en un mundo en que la mujer con frecuencia hace todo, menos su voluntad.

Otro ejemplo con gran influencia en el mundo político es el brillante preámbulo de la Declaración de Independencia de los Estados Unidos, en el segundo párrafo donde dice:

‘Juzgamos que estas verdades … que los hombres son creados iguales; que son dotados por su Creador de ciertos derechos inalienables; que entre éstos están la vida, la libertad y la búsqueda de la felicidad…’

¿Cómo se traduce a la voz de la mujer esa noble opinión filosófica o política? No se aplica en realidad…pero quizás, en la voz de la mujer, rezara así:

“Juzgamos que toda criatura humana debe valer lo mismo porque a todas las paren iguales, y nacen desnudas”.

Rhina Espaillat reflexiona sobre nuestro canto patriótico y nos dice:

Pide Paciencia y Perdón porque va a cometer un delito verbal ya que los himnos nacionales son textos sagrados, pero en el precioso himno dominicano, con la letra de Emilio Prud’Homme hay una estrofa que, a pesar de su belleza y fuerza emocional, la segunda estrofa la deja menos satisfecha, a pesar de estar muy bien dicho, pero no es así:

Ningún pueblo ser libre merece

Si es esclavo indolente y servil;

Si en su pecho la llama no crece

Que templó el heroísmo viril...

Hay que examinar minuciosamente el sentido de esas palabras; puede aceptarse como verdad que el esclavo tiene la culpa de su esclavitud, porque no sabe o no supo defenderse del esclavero, y no sabe o no puede quitarse el yugo impuesto por el dueño que lo compro? Que la libertad no es un derecho, sino un premio que solo los fuertes, valientes y armados, logran merecer? En ese caso, los que esclavizan a los demás, están haciendo lo normal, porque pueden! Y los niños, los desvalidos, los débiles no deben ni soñar con la libertad, porque no la merecen ! Esa estrofa lleva la marca de la voz más imponente de su época: la voz del hombre orgulloso de sus fuerzas y seguro de sus actos, el guerrero heroico del siglo XVIII –XIX, el que formó las naciones de las Américas a fuerza de sangre y sacrificio.

En los cuatro versos que termina la estrofa, aparece la figura de Quisqueya, la Patria, tradicionalmente una figura de mujer como todas las patrias, pero esta Quisqueya es la figura de Atenas, la diosa guerrera de la Grecia Antigua, brava, armada, totalmente sin aspecto femenino, una macha. Recuerden que la valiente Atenas no tuvo madre, nació prodigiosamente del cerebro de su padre Júpiter, el Dios Olímpico que la creó a su gusto y en su imagen.

Más Quisqueya la indómita y brava

Siempre altiva la frente alzará;

Que si fuere mil veces esclava

Otras tantas ser libre sabrá.

Esta es una Quisqueya que conoce el campo de batalla; es experta en el uso de las armas y sabe vencer al enemigo externo, pero probablemente nunca ha cocinado y servido las habichuelas y el arroz para sus hijos en su rancho cibaeño, nunca ha tenido que ponerle frente a esos enemigos internos, que conoce la típica madre de nuestra isla sufrida: la pobreza, la falta de oportunidad, la tendencia a criar el hijo fuerte, la hija bonita, y la necesidad de proteger la porción del hijo débil, el chiquito, la fea, la desvalida, el poco hábil, el extraño que no es familia pero llegó con hambre.

Los héroes militares, tradicionalmente hombres valientes, ante todo, son necesarios, y bien merecen elogio, pero hay otra clase de heroísmo que no es viril, que no tiene genero especifico, que es sencillamente humano, pero que se reconoce con gran claridad en la voz de la mujer. El que quiere gobernar el Estado, necesita demostrar ambos tipos de heroísmo, y sobre todo devoción hacia la familia, trátese de una docena o de varios millones, porque el Estado no es más que el ranchito cibaeño en grande. Permítanme cerrar con una versión distinta de esa segunda estrofa del Himno Nacional, una que representa no la voz del guerrero del siglo pasado, sino la voz de la mujer del siglo presente, nuestra voz, la voz que nos toca utilizar para hacer cambios necesarios en el Mundo que van a heredar nuestras hijas y nietas, nuestros hijos y nietos.

La versión de nuestra amada Rhina Espaillat reza asi:

Todo pueblo ser libre merece

sin recurso al machete y fusil,

La conciencia del mundo establece

que ser libre es derecho civil.

Oh Quisqueya, si es justa y piadosa

la luz de la ley alzara!

Por el bien de su pueblo afanosa,

ser amparo de todos sabrá.

Doña Rhina P. Espaillat debe ser más y mejor conocida en nuestro país, ella que ha permanecido fiel a sus raíces; sus letras deben transitar en las manos de los escolares, estudiantes, además tiene un libro sobre JUAN PABLO DUARTE, que espera, clama ser difundido ampliamente. Es mucho lo que hay que conocer de esta Mujer-historia, Madre, Maestra, Amiga, Hermana, Contertulia que ofrece de manera tan generosa sus saberes, su tiempo, su alegría. SALUD Y LARGA VIDA!

Rosina Anglada

27 de agosto 2021.

 

 

 

 

 

 

 

 

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