Londres, Inglaterra, por Ramón Luna, 03/05/2024. - Los pronunciamientos del expresidente Leonel Fernández, de Don Omar Fernández, candidato a senador por el Distrito Nacional, y de sus acólitos, respecto a la participación del presidente Luís Abinader en la campaña política es la mayor demostración de que este proceso terminó antes de que se cuenten los votos.
Es de imberbes pensar, que en
unas elecciones presidenciales y congresuales el presidente y candidato del
partido de gobierno se quedaría encerrado en su casa, que el Partido
Revolucionario Moderno renunciaría a matar varios pájaros de un tiro y dejaría
pasar la oportunidad de liquidar a un grupo de políticos que no tienen nada
ofrecer al pueblo dominicano.
La estrategia de sustentar la
campaña de Omar contando con los votos de la militancia del Partido
Revolucionario Moderno fue descabellada e infantil, pero es más descabellado
pretender, que la maquinaria del partido y el presidente Abinader dejarían a
Guillermo Moreno solo.
La historia electoral está
repleta de candidaturas locales que han sido asumidas y ganadas por el
presidente y el partido de turno.
En 1994 el doctor Joaquín
Balaguer y el Partido Reformista Social Cristiano aplastaron las aspiraciones
de José Osvaldo Leger, aupando la candidatura senatorial de Víctor Hugo
Hernández, y no habrían sido posibles las arrolladoras victorias del Partido de
la Liberación Dominicana sin la total implicación del expresidente Fernández en
las campañas de sus candidatos.
Donde usted compró, venden
Hay que recordar que a Danilo
Medina lo aplastó el estado. Ese estado gobernado por su presidente y su
partido.
Margarita Cedeño, dicho por
ella misma, no fue candidata "porque Leo no quiso".
El peor enemigo de las
aspiraciones de los candidatos de la oposición es la hemeroteca, basta con un
click para que afloren todas las diabluras cometidas por estos señores en el
pasado reciente y esto los invalida para hacer cualquier tipo de crítica a los
candidatos oficialistas.
Don Omar Fernández, quien
quiere borrar con mierda de gato el vínculo que lo une a su padre, lo había
tenido muy fácil. Ahora hay que apechugar y es muy cuesta arriba cuando todo lo
has conseguido dedocráticamente.
Para el Partido Revolucionario
Moderno e incluso para el Partido de la Liberación Dominicana, la derrota de la
"Promesa Fecunda" es más simbólica que práctica. Un senador más o un
senador menos, en este caso, no tendrá ninguna incidencia en el control que el
PRM tendrá del Poder Legislativo, pero mataría dos pájaros de un tiro.
Lo positivo de esta catástrofe
es que se abriría una oportunidad de oro, para que surja una oposición
renovada, con ideas nuevas y que pueda contribuir al fortalecimiento de la
democracia dominicana.
Termino diciendo, que ya está
bien de tanto lloriqueo. Lloriqueo cuyo único propósito es provocar lastima y
justificar la contundente paliza que le propiciará el Partido Revolucionario
Moderno en las elecciones del próximo 19 de mayo.
0 Comentarios