San Cristóbal, 23/03/2024. – La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) forma parte del Sistema de las Naciones Unidas y es la organización intergubernamental líder que desde 1951 promueve una migración humana y ordenada para beneficio de todos, con 175 Estados Miembros y presencia en 171 países.
Esta es la organización que ha
pretendido suplantar el poder legalmente establecido en nuestras leyes y
sustentado en nuestra constitución, tratando de establecer un campo para refugiados
haitianos en suelo dominicano disfrazado de centro para la migración humana y
ordenada.
Nuestro país es y tiene que
ser respetado por las organizaciones internacionales del tipo que sean, ninguna
organización puede pretender usurpar los poderes concedidos a quienes a través del
voto directo o por delegación son electos para dirigir la nación.
Los dominicanos y dominicanas
debemos estar alertas hoy mas que nunca ante las presiones y los intentos de
socavar el legitimo derecho de ser nosotros quienes decidamos sobre nuestras políticas
públicas del tipo que sean estas y estén referidas al ámbito al que correspondan.
Este intento de la OIM tiene
que ser un ejemplo para que todos y todas despertemos de una buena vez, este
atrevimiento, esta falta de respeto a nuestras decisiones tiene que prender
todas las alarmas sobre el peligro que significa seguir permitiendo la coexistencia
de estas organizaciones en nuestro territorio.
Nuestro presidente que tiene
todo el respaldo de la sociedad en lo que se refiere al tema de relaciones
exteriores esta obligado a pedir la salida de nuestro territorio de este tipo
de organizaciones que solo traen afrenta a nuestra patria e intentan suplantar
el poder de nuestra constitución.
Hoy el reclamo de cada buen
dominicano comprometido con la patria tiene que ser la salida de nuestro
territorio de la OIM y todas las organizaciones que pretendan imponernos una
migración que no necesitamos ni podemos sustentar en nuestro territorio.
Es tiempo de retomar el
pensamiento Duartiano y hacer realidad las letras impresas en nuestro himno
nacional, “Donde el genio de Sánchez y Duarte, A ser libre o morir enseñó”.
¡Libertad!
Que los ecos se agiten
Mientras
llenos de noble ansiedad
Nuestros
campos de gloria repiten
¡Libertad!
¡Libertad! ¡Libertad!
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