San Cristóbal, 13/03/2023.- Gil Mercedes (Negro) es oriundo de la comunidad rural de Valentín en Cambita, emigro con su familia en 1963 a San Cristóbal y en 1968 inició la venta ambulante de maní, vendiendo su maní caliente por las escasas calles del poblado a un (Chele) centavo por paquetito.
Ha procreado
catorce hijos, todos criados en el barrio jeringa en la calle dos frente a la panadería
Patricia que fue de su propiedad, de sus trece hijos hay tres ingenieros y un
Doctor “los he logrado sacar adelante gracias a la venta de los granos”, nos
dice con jocosidad.
Negro es un hombre afable, de buen humor y muy creyente en Dios, camina las calles del centro de la ciudad lleno de esperanza y esa sonrisa propia de nuestra gente más humilde, voceando “llevo lo grano, caliente, maní, maní”.
Desde
niño se acostumbró a trabajar y aprendió a fabricar bloques para construcción, construyó
su panadería y desde el año 1970 hasta el año 2000 vendía pan en la panadería de
su propiedad.
En el
2000 regresó a la venta de maní y luego por un edema pulmonar tuvo que parar,
en el 2002 y luego de la pandemia de la COVID-19 retornó a las calles de San Cristóbal
a vender maní.
Gil
Mercedes ha logrado tal vez sin saberlo mantener una de las tradiciones de más
larga data en toda Latinoamérica el pregón y la venta del maní.
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