Primero la soberanía y constitución, luego los acuerdos internacionales

San Cristóbal, 12/02/2023. - El vocero de la Presidencia, Homero Figueroa, respondió al Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Volker Türk, afirmando que ante la realidad que atraviesa Haití, la verdadera situación desgarradora es la inacción de la comunidad internacional para buscar una solución desde ese mismo país y no, desde la República Dominicana.

En el mensaje emitido a través de su cuenta de Twitter, se lee: “Señor volker turk, lo desgarrador es ver la inacción de la comunidad internacional ante los reiterados pedidos del Presidente Luis Abinader de buscar una solución en Haití a los problemas de Haití. No hay solución. Nuestro país seguirá ejerciendo su soberanía”.

Esta respuesta surge por declaraciones previas del Alto Comisionado, Volker Türk, quien se encuentra de visita en la vecina nación y manifestó que, de acuerdo con testimonios obtenidos, se estarían deportando mujeres embarazadas, menores no acompañados, heridos y enfermos, desde la República Dominicana, situación que calificó como desgarradora.

La Republica Dominicana es signataria del Acuerdo de Palermo, un tratado internacional adoptado en 2000 por las Naciones Unidas que busca combatir el tráfico de personas y proteger a las víctimas de la trata de personas.

Este acuerdo se conoce como la Convención de las Naciones Unidas contra la Delincuencia Organizada Transnacional (UNTOC, por sus siglas en inglés) y su Protocolo adicional para prevenir, reprimir y sancionar la trata de personas, especialmente mujeres y niños.

El Acuerdo de Palermo establece un marco legal para prevenir y combatir el tráfico de personas, y define la trata de personas como un delito grave que debe ser perseguido y sancionado por los Estados.

El tratado también establece la obligación de los Estados de cooperar en la investigación y persecución de los delitos relacionados con la trata de personas, y de proteger y brindar asistencia a las víctimas de la trata.

El Acuerdo de Palermo es uno de los instrumentos más importantes para combatir la trata de personas a nivel mundial, y ha sido ratificado por más de 170 países en todo el mundo. Este acuerdo ha sido crucial para la prevención y la lucha contra la trata de personas y para garantizar la protección y los derechos de las víctimas de este delito.

La República Dominicana está obligada por varios acuerdos internacionales a proteger y respetar los derechos de los refugiados. El principal acuerdo que obliga a la República Dominicana a tener una ley para refugiados es el Convenio de Ginebra sobre el trato de los refugiados y sus apócrifos.

Este convenio, adoptado en 1951, establece los derechos y protecciones a los que tienen derecho los refugiados y establece las obligaciones de los Estados en la protección y asistencia a los refugiados.

Además, la República Dominicana es parte de la Carta de las Naciones Unidas, que establece la obligación de proteger los derechos humanos y garantizar el respeto de la dignidad humana para todas las personas, incluidos los refugiados.

También es parte de la Convención Interamericana sobre Refugiados de la Organización de los Estados Americanos (OEA), que establece la protección de los refugiados y las obligaciones de los Estados en la región.

En resumen, la República Dominicana está obligada por varios acuerdos internacionales a proteger los derechos de los refugiados y a tener una ley que garantice su protección y asistencia.

Sin embargo, ningún acuerdo internacional puede estar por encima de la Constitución y soberanía nacional, por lo que solo se pueden reconocer en el territorio Dominicano los acuerdos que no sean contrarios a nuestra carta magna.