Entre el peso pronto para saciar el hambre del día, la ambición desmedida de los explotadores mineros, la complicidad de las autoridades y la indiferencia nuestra perecen las lomas del Pomier, gigante apuñalado por todos los costados, cabeza cercenada, brazos arrancados y piernas mutiladas, ya solo el espíritu queda y un sueño de que como el ave fénix resurgirá de sus cenizas.
Hoy nos toca levantar la voz y
unirla a la de aquellos que reclaman un alto a la explotación minera en el Pomier,
hoy nos toca unir esfuerzos desde nuestras individualidades y convertirnos en
colectivo poniendo por un momento de lado nuestras diferencias y sumando estas
coincidencias que nos hermanan mas allá de colores, religión, sexo, ideología,
colores partidarios o condición social.
Ya basta del silencio que nos
hace cómplices, desde aquí abro la invitación a que nos unamos como pueblo, y
no será la primera o la ultima vez que logremos dejarnos llevar por la razón común
para salvar lo que es de todos, la historia nos tiene un lugar reservado, ahora
depende de nosotros caminar el camino que nos marcan los días para que el
futuro cambié y podamos decir que hemos legado a nuestras futuras generaciones
algo digno de preservar.
YO DIGO ¡YA BASTA!
fotos gracias a Nelson medina
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